COLONIA DE SACRAMENTO
Amaneció un día
gris y ventoso pero todo prometía que iba a pasar un día muy interesante, pero
poco a poco fui cambiando de parecer. Pronto comenzó a llover y la niebla a
cerrarse sobre el autobús que nos llevaba,
Íbamos un
grupo de turistas, mayoritariamente, muy mayoritariamente brasileños, así que
las explicaciones también eran en portugués, si bien entremezcladas con
castellano lo cual hacia que se entendieran perfectamente. El guía, Alberto
Tito Pintos, es nativo de Colonia del Sacramento y nos da una lección de la historia
de la ciudad: Cómo fue fundada por los portugueses aprovechando las líneas difusas
de los límites del Tratado de Tordesillas entre los reyes de España y Portugal
sobre la colonización del Continente Americano y cómo a partir de ahí ha
mantenido esa situación de conflicto permanente sobre su pertenencia a uno u
otro reino que hace que tenga en su construcción, una mezcla tal de
edificaciones y detalles arquitectónicos difícil de encontrar.
Antes de
llegar y haciendo tiempo para ver si dejaba de llover estuvimos en la colonia suiza
que se llama Nueva Helvecia en un hotel impresionante en medio del campo con
unas instalaciones para quedarte a vivir allí. También paramos en una granja,
la Granja Arenas, cuyo dueño tiene un Museo de Colecciones, entre ellas el
record Guinness de lapiceros, más de 18.000.
Y al fin
llegamos a Colonia del Sacramento y continuaba lloviendo, aunque menos, y
decidimos arriesgarnos con el paseo guiado.
Colonia del
Sacramento es en esencia una pequeña ciudad colonial que dada su situación geográfica
de dominio de la entrada del rio de la Plata(?), (está enfrente de Buenos
Aires, a 42Km) ha resultado y de hecho aún hoy lo resulta porque es la entrada
navegable a toda la zona fronteriza de los países del Cono Sur (Norte de
Argentina, Sur de Brasil, Paraguay, salida de productos de Bolivia y oeste de
Uruguay). De ahí su controvertida historia. Se recorre en poco tiempo como no
quieras investigar algo especial sobre ella.
De vuelta a
Montevideo, descansito y poco mas.
Ha vuelto la pluma y la mirada del naufrago del Sur.
ResponderEliminarEstaré pendiente del diario y disfrutaré de las fotos.
Las primeras fotos muy bonitas.
Disfruta de la aventura, vive intensamente cada momento y cuéntanos ...... para " darnos envidia sana" . Gracias por hacernos compañeros de viaje. Un abrazo.
Lastima de día, pero parece interesante. Supongo ya empezaron los madrugones pero disfruta y sigue contándonos que como dice Satur te seguimos y te envidiamos . Un beso
ResponderEliminarImpresionada con la colección de lapiceros. Me uno a la envidia
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