PUERTO MONTT Y ANGELMÒ
Llegamos finalmente
a Puerto Montt y por fin he podido tomarme unos cafés espléndidos.
Puerto Montt
es una ciudad en la que dicen los chilenos que no hay nada destacable, pero yo
en los dos días que he estado me he sentido muy a gusto paseando por sus calles
y viendo como es la gente.
Es como un
gran supermercado donde hay muchísima gente vendiendo y comprando casi de todo.
Alrededor de
las cuatro o seis calles principales hay todo tipo de comercios, puestos
callejeros, gente vendiéndote cosas o comprándolas y por la tarde en La
Costanera son innumerables las personas que pasean o toman el sol.
El día de la
llegada la dediqué a organizar como iba a seguir, pues dependía de cuando había
fiestas en Castro (Chiloé) para quedarme más o menos días, pero finalmente me
quedo solamente dos y me voy a Chiloé una semana y a la vuelta retomaré que ver
aquí.
El día
siguiente fui de visita a Angelmò, es un muelle que recibe la pesca y la visita
de los vendedores de todo el archipiélago de Chiloé.
Es un
mercadillo en el que puedes surtirte, si vives aquí, de toda clase de pescado,
hortalizas, quesos, carne y recuerdos que fabrican en todo el archipiélago,
donde puedes coger botecitos para hacer excursiones por las distintas islitas cercanas
y donde te puedes encontrar todo tipo de personas y personajes.
Por fin me
he reconciliado un poco con mis temas fotográficos (los botes, los mercadillos,
etc.) y he celebrado esa vuelta a la civilización.
Cogiendo velocidad de crucero por lo que veo..... Ya veremos las fotos de Chiloé y tus comentarios sobre los festejos. DISFRUTA..... aquí pues estamos algo así como Green with envy (envidia cochina). Cuídate
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